El crowdfunding, (financiar proyectos recaudadando dinero de una multitud de personas a través de internet) va ganando terreno - a medida que la crisis financiera no se termina de resolver - y aparece como la vanguardia de una revolución de la inversión, basada en la tecnología. Esta modalidad supuestamente quita a los intermediarios del sistema financiero y genera una inversión "directa" que les permite a los inversores controlar el riesgo diversificando sus inversiones y bajo su propio manejo. Esto abre oportunidades y nuevos riesgos. Por un lado la ya mencionada diversificación, permite a los inversores dividir el riesgo y por otro lado tener un supuesto manejo en las decisiones sobre el capital invertido. En el primer caso es una realidad que dividiendo las inversiones el riesgo disminuye, también es cierto que cuánto menor sea la participación porcentual en un proyecto dado, menor será la posibilidad de participáción real en las decisiones sobre ese proyecto.
Si nos referimos a proyectos de filantropía, en donde la participación se realiza sin la espera de una recompensa monetaria, el crowdfunding es una excelente forma de sostenimiento y democratización de saberes, investigaciones y proyectos beneficiosos de algún modo, para aquella multitud que los financia, financiamiento éste no con el solo afán del retorno de la inversión si no de retorno en beneficios en relación a la comunidad. The correspondent, un diario digital holandés ha recibido el 105% de su financiamiento para el lanzamiento del medio en el lapso de 8 días. The correspondent no incluye publicidad y sus ingresos provienen del financiamiento de sus lectores. Esto permite a los participantes, sentirse parte de un colectivo que puede cambiar para sí, la forma en la que se informa, y el modo como están procesadas las noticias.
Las jóvenes generaciones saben claramente que con los medios de financiamiento convencionales los desarrolladores terminan manejando el producto en la forma en que les produzca rentabilidad y esa rentabilidad no está siempre en consonancia con los deseos, las necesidades y las urgencias de los usuarios de esos productos.
Ultimamente los proyectos de financiamiento colectivo de edificios está ganando popularidad, inclusive se están desarrollando proyectos de infraestructura urbana en diferentes partes del mundo con la forma de financiamiento colectivo o crowdfunding. En ésta última modalidad, el crownfunding también está ganando adeptos entre miembros de las jóvenes generaciones. Este sector de inversión (tanto como el sector financiero) tienen la expectativa del retorno o rentabilidad por parte del inversor o financiador de un proyecto dado. En algunas casos se esperan ganancias de 8 a 10% sobre el capital invertido y aún más.
A medida que la comunidad reguladora internacional ha ido frenando la evasión de impuestos que se producía mediante la colocación de fondos en estructuras financieras en centros financieros extraterritoriales, el ámbito de los bienes raíces financiados con fondos colectivos no regulados abre oportunidades de inversión directa sin precedentes para el capital global (transnacional) en el tejido urbano. De este modo los portales de crowdfunding de bienes raíces en expansión son impulsados por inversores internacionales con gran necesidad de rendimiento, teniendo en cuenta que posteriormente a las crisis de las carteras, los rendimientos son muy escasos y las tasas de interés se mantienen en los mínimos históricos.
Habría que ver si la modalidad del crowfunding, que aparece, como el ideal utópico de préstamos democratizados no termina convirtiéndose en una pesadilla en donde las inversiones al modo de dinero cataclísmico al decir de Jane Jacobs, lejos de urbanizar las ciudades a escala humana, profundice lo que ya está sucediendo: la urbanización en función solamente del rendimiendto financiero y la especulación. En su libro "Muerte y vida de las grandes ciudades" más precisamente en el capítulo "Dinero gradual y dinero cataclísmico"Jane Jacob describe las tres formas básicas en las que el dinero produce cambios tanto para generar decadencia como regeneración en una comunidad. Cualquiera de las diferentes formas de financiación, si se produce de forma masiva o cataclísmica, tiene, según Jacobs efectos deletéreos sobre las ciudades, en contraposición con la disponibilidad gradual del dinero que permite cambios también graduales, constantes, densos e inclusivos.